viernes, 30 de diciembre de 2011

Otro argumento contra el TAI

Estos días en los que tengo mucho que estudiar, y mientras le robo horas para leer otros libros distintos de las asignaturas que estudio, me pregunto si, en caso de que a alguien se le ocurriera obligarme a tomar antipsicóticos, y la toma de estos antipsicóticos me impidiese concentrarme para estudiar, podría considerarse trato inhumano y degradante, o directamente vulneración de mis derechos más elementales. Creo que sí, puesto que me estarían negando el derecho a la formación, a la educación y a la búsqueda activa de empleo, además de sufrir los efectos secundarios físicos y psíquicos directamente derivados de la ingestión de estos fármacos.

Una vez más, no al TAI.

Modelos de Locura (Resumen primera parte)

La esquizofrenia es un constructo poco claro en su consistencia, menos claro aún en sus causas.

Agrupa síntomas demasiado diversos, y los agrupa casi aleatoriamente, de manera que dos personas con síntomas que no tienen nada en común pueden ser diagnosticadas de lo mismo. Esa falta de consistencia dificulta todos los estudios en torno a este supuesto diagnóstico, ya que resulta dudosa la validez y fiabilidad de todos los estudios sobre un fenómeno cuya descripción no está claramente formulada. Si la descripción del fenómeno está mal formulada, poca luz pueden arrojar todas las investigaciones que se basen en este error de base, error que resulta, desde un punto de vista científico, un claro fraude epistemológico. Sería un chiste sino fuese porque afecta a la salud de millones de personas, así como a la percepción que de ellas tiene la sociedad.

La práctica psiquiátrica en relación a este diagnóstico tan poco científico, a lo largo de los últimos cien años (desde que se acuñó, con tan poca fortuna, como no sea para la industria farmacéutica), abarca ciénagas éticas que van desde los "asesinatos terapéuticos masivos" (anteriores en el tiempo al holocausto nazi, y tristemente inspiradores), a los tratamientos psicofarmacológicos forzosos, pasando por esterilizaciones, terapias electroconvulsivas, campañas estigmatizadoras en los medios de comunicación, y campañas desestigmatizadoras, basadas estas últimas en el supuesto erróneo de que el "esquizofrénico no es violento (sólo) se toma la medicación"

La industria farmacéutica orienta toda su labor a un único fin en este ámbito de la "esquizofrenia", conseguir un número cada vez mayor de clientes de psicofármacos. La imprecisión del diagnóstico esquizofrenia, los tratamientos forzosos y, ahora más recientemente, los tratamientos "preventivos de la psicosis", prometen a esta industria un lucro sin límites, que sólo puede ser frenado por la toma de conciencia de los profesionales y asociaciones de usuarios y familiares de esta motivación tan poco terapéutica en realidad para las personas afectadas por cualquiera de los "síntomas " englobados bajo esta difusa etiqueta.

La percepción de la "esquizofrenia" como una enfermedad de origen biológico o genético, no sólo no contribuye en nada a la recuperación de estas personas, sino que la dificulta al suspender toda esperanza, toda implicación activa del sujeto en la comprensión y gestión de sus síntomas, y todo puente que la sociedad pueda tender en esta misma dirección.

jueves, 29 de diciembre de 2011

Ciencias y letras

A los de letras parece que nos está vedada la comprensión de la ciencia, que sólo podemos relacionarnos con ella como legos admiradores acríticos de su complejidad. Esos palabros, esos experimentos, esas fórmulas indescifrables que ocultan los saberes del universo, las claves del bien y del mal, los misterios no aptos para profanos.

Y un cuerno.

Las letras sirven, entre otras cosas, para entender las palabras, para leer entre lineas, también en la divulgación científica, en la propia investigación. Palabras que rodean a la ciencia cuando esta se presenta en sociedad,(Ay, las ciencias sociales, esas hermanas pobres) palabras como sesgo, grupo control, validez, fiabilidad, anagramas de patrocinadores...

Quién elige qué, y por qué y cómo y para quién investigar.

Muy interesante siempre la lectura humanística de la literatura científica. ¿Literatura? Anda ya, quién les diera. Pero así le llaman, no me lo inventé yo.

Y la tecnología, ay, la tecnología, esos programas informáticos, esas fotos del cerebro, esos proyectos faraónicos de desciframiento del genoma humano, cuánta ciencia, cuánto capital humano para terminar con todos nuestros problemas, especialmente la alopecia, el adelgazamiento, las prótesis mamarias, esos insomnios metafísicos que nos separan de la felicidad completa.

Investiguen, investiguen, no se corten. Nosotros los legos permanecemos atentos a sus iluminaciones con la boca abierta, a algunos les caerá alguna baba por el esfuerzo, o el susto.

lunes, 26 de diciembre de 2011

Modelos de locura

En mi casa siempre venía Papá Noel, por una cuestión práctica: llegaba antes que los otros tres, y así, podíamos disfrutar de sus regalos durante las vacaciones. Ahora, Papá Noel sigue trayendo los juguetes en tiempo de vacaciones. Vuelvo a ser estudiante, así que es perfecto. Los juguetes de este año prometen horas de reflexión, que es ahora mi juego preferido.

Sin embargo, la reflexión esta vez deja paso a la impulsividad, porque no puedo esperar a leerlo para hablaros de él: Modelos de locura (Ya sabéis. Read, Mosher y Bentall. Se publicó por primera vez en 2004, el año que murió Mosher, que ahora ya debe llevar unas cuantas juergas con R. Laing.)

Bueno, y también me trajo El cuerpo sin órganos. Presentación de Gilles Deleuze. José Luis Pardo, un filósofo hablando de otro.
Tienen mucha relación: El movimiento. Parece que van a hablar de lo mismo.

Hace falta fuerza para moverse del reduccionismo biologicista. Hace falta desplazarse por muchas fragmentaciones para poder hacerse una idea de conjunto. Tanto Pardo como los tres psicólogos saben de desplazamientos, y de fragmentaciones. Todos tienen que aceptar que se les fragmente cuando se mueven en direcciones distintas por territorios desterritorializados, por caleidoscopios identitarios a la medida del mundo. Luego hay quien se extraña de quien pierde la razón, de aquel o aquella a quien miran con extrañeza, sólo porque encarna la pérdida que nos acecha a todos los demás. Qué tan a menudo se piensa que quien pierde la razón pierde todo lo demás, cuando no es cierto. Pero al pensarlo, sí se le niega todo lo demás. Como aquel chico que, llevando varios días con los ojos cerrados, y ante la irracionalidad de tal extraña demencia (extraña por inclasificable, demencia por el mismo motivo)nadie le había preguntado por qué no abría los ojos. cuando alguien lo hizo, el chico abrió los ojos para responder. Su respuesta, cual si fuera de mi tierra, era una pregunta. "¿Por qué nadie me lo preguntó antes?", o algo parecido. ¿Quién era el irracional? ¿Quién alimentaba la extrañeza? ¿Puede una pastilla sustituir a una pregunta, simple, humana, necesaria como la razón más elemental, querido Watson? Hay todavía quien cree que sí, y así nos va.

Yo no me puedo quejar, que conste, a mi me hablan como siempre, por más volada que esté. Así es que intento corresponder, y nos entendemos. Durante los últimos años he pensado mucho en las claves para que me vaya bien, además de en las posibles causas de que, aún así, de vez en cuando me toque desterritorializarme, marcharme a la deriva de mí misma y delirar la historia, y los climas y los pueblos, como decía Deleuze. (Que quede entre nosotros, pero apuesto a que también viajaba lo suyo, el señor filósofo) "Leer a Deleuze es, en buena medida, hacer con él este recorrido experiemntal por el cual alcanzamos la capacidad de diagnosticar nuestro presente a fuerza de conectar con el movimiento que define la propia, irreductible y no siempre simpática novedad de nuestra época"

Bueno, de momento estoy con los prólogos, un par de páginas de cada uno, y esto promete. Va a ser lento porque me esperan unos exámenes dentro de pocos días, ya tengo las vacaciones organizadas, que dejan de serlo. Intentaré divertirme, que es para lo que sirve estudiar. (Antes servía para encontrar trabajo, según cuenta la leyenda, pero si me meto en fantasías pierdo la concentración. Motivación intrínseca creo que le llamáis algunos. Yo le llamo acostarme pronto con los libros cerca)

No me olvido del TAI ¿eh? Pero os dejo, de momento, con unas palabras de la contraportada, a modo de animación a la lectura:

"Modelos de locura aboga por una respuesta más humana y efectiva para el tratamiento de las personas gravemente afectadas por la psicosis. Por su planteamiento alternativo al tiempo que riguroso, se trata de una obra esencial para psiquiatras y psicólogos clínicos, para los profesionales y trabajadores de los servicios sociales y de salud mental, y para todos los estudiosos de la sociedad y la cultura."

domingo, 25 de diciembre de 2011

Rufus May (Madrid 11-11-2011 Jornadas Manantial Salud Mental)

Aquí os presento a Rufus May, un psicólogo clínico que sabe de lo que habla. Me encantaría tener una lista llena de psicólogos como él, me encantaría hacer pública esa lista y recomendársela a todos mis amigos sobremedicados, y a todas las personas cuyos miedos "misteriosos" les impiden incluso fiarse de los psicólogos. En tiempos de hablar del TAI, todavía hay muchas personas a las que escuchar antes de formarse una opinión, no sea que esa opinión esté más basada en la pereza de quedarse con lo malo conocido que en la vocación de ser buenos profesionales.


Feliz año nuevo

Un año nuevo sería aquel en el que no hubiese problemas viejos.
Eso sí que sería nuevo.
Sobre todo que no hubiese problemas.
Yo me apunto, a ver si me toca, ya que no me tocó la lotería.

lunes, 19 de diciembre de 2011

Dormir, respirar, confiar.

Pues no sé qué más decirte, amiga. Que confío en tí, en tu capacidad para irte a buscar a donde sabes que puedes hacerlo. Que confío en que sabes que te llevamos puesta los días que haga falta, a cualquier hora. Que no me creo que no recuerdes quién eres tú, ni quién somos nosotros. Lo sé y punto, ya sé que no es fácil explicar por qué estoy tan segura, pero después de trescientas entradas a vueltas con lo mismo, pues algo se sabe ¿no? Que a ti te falten unos días para aterrizar pues una putada, qué te voy a contar que no sepas. Pero que vas a aterrizar y cuidarte muchísimo, sobre eso no tengo ninguna duda. Y ya de vuelta, por aquí estaremos, como siempre, para darle vueltas al mundo antes de que el mundo nos dé la vuelta a nosotros. No sabe con quién se las gasta, el mundo ese. De vuelta y media nos va a encontrar, si es que se atreve a buscarnos. Voy a soñar contigo, no te desconectes, por favor. Te quiero mucho.

viernes, 16 de diciembre de 2011

Otro artículo contra el TAI

Otro artículo contra el Tratamiento Ambulatorio Involuntario, eufemismo políticamente correcto de MEDICACIÖN FORZOSA CONTRA LOS ENFERMOS MENTALES.

Además de persona diagnosticada de cosas que empiezan por "esquizo-", y entre otras cosas, me considero investigadora. Cierto que la fiabilidad y validez de mis estudios no son excesivemente altas en términos positivistas, desde el enfoque metodológico cuantitativo. La población estudiada se reduce a mi persona, y algunos amiguetes con quien he tenido el placer de charlar durante los últimos años. Pero si movemos un poco el enfoque, y si tenemos en cuenta que a las ciencias sociales (y creo que las ciencias que tratan del sufrimiento psíquico humano lo son)el positivismo, y ya no digamos el biologicismo, les acaba por quedar escaso, más pronto que tarde.

Así que desplazamos el enfoque y nos acercamos a métodos más cualitativos, subjetivos incluso, ya no es un crimen hablar de subjetividad en psicología. (Porque si no hablamos de subjetividad en psicología, ¿de qué pretendemos hablar?)Desde un punto de vista más cualitativo, se me ocurren cosas. Por ejemplo pensar en la cantidad de brotes-viajes-emergencias-desterritorializaciones, y los nombres que se os ocurran, que me tocó experiemntar durante los últimos diez años, así a bulto. De lo que aprendí con ellos, y sobre todo acerca de ellos. Que remiten, que se identifican con un poco de experiencia, que como mejor se pasan es con cariño y sin alarma. Que tienen sus días super duros y que en algunos de estos no me hubiera importado empastillarme un poquito sino fuese porque sé que la mayoría de psiquiatras no acaban de entender lo de un poquito (de cantidad, de tiempo...), y no apetece discutir con ellos, y menos en pleno viaje donde no me fío ni de mi madre.

A veces se aprende de la negación, de no saber nada excepto lo que no se quiere. Y yo no quiero la versión oficial, yo no quiero que me engañen diciéndome que lo que me pasa es crónico, y discapacitante, porque no es cierto. En mi caso no es cierto. Y si no es cierto en mi caso, puede no serlo en tropecientos casos más. Y si a mí me funciona este sistema, puede funcionarle a muchísimas personas más. Y si funciona en Finlandia, con el señor HAIKKULA y otros muchos que alguien irá poniendo en los comentarios, puede funcionar aquí. Y para eso hace falta investigación, y para investigar hace falta valor. Valor en la apuesta financiera, pero valor también en la apuesta epistemológica, valor en las connotaciones éticas de lo que se investiga, valor para afrontar riesgos y eliminar sufrimientos de la forma menos agresiva posible. ¿Qué sentido tiene cambiar un sufrimiento por otro? ¿Qué sentido tiene que se anuncie una medida como el TAI, supuestamente terapéutica, y a nosotros los diagnosticados se nos pongan los pelos como escarpias sólo de pensarlo? ¿Qué sentido tiene multiplicar el estrés para sufrimientos que precisamente se disparan con el estrés? ¿Puede ser el estrés de una medida violenta terapéutico? ¿Puede ser la violencia terapéutica?

El TAI no soluciona nada, excepto quizá las cuentas de las industrias farmacéuticas, que tampoco acaban de dar pena, por qué no decirlo. Desde luego a los destinatarios no nos arregla nada, como no sea despertarnos terrores suicidas para defendernos de la indeseable escena de que un día vengan a nuestra casa blandiendo una jeringuilla cargada y no sepamos, en medio de la psicosis, si vienen a matarnos o a convertirnos en mutantes, que para el caso, para algunos casos, es parecido. Dejando a un lado metáforas de pesadilla, que es lo que provoca la idea del TAI a fin de cuentas, entraríamos en el tema de los derechos.

Si os digo la verdad, no sé muy bien cuáles son las motivaciones de los organismos internacionales (ONU, por ejemplo)para que en el año 2006 hayan decidido que las personas con discapacidad somos tan personas como las otras. No sé por qué entonces y no antes, pero sé que ese año se redactó una Convención Internacional de los Derechos de las personas con Discapacidad, con carácter vinculante, que insta a los estados miembros a adoptar medidas en la dirección del empoderamiento, de la libertad de decisión, de la igualdad efectiva con el resto de personas. Una convención que supone un cambio de paradigma, del modelo médico-rehabilitador al modelo social, basado en la ciudadanía y su ejercicio pleno, basado en el reconocimiento de los derechos de estas personas en igualdad de condiciones que las demás. Vale que este tipo de textos a menudo se quedan, en casos particulares, en mera declaración de buenas intenciones, pero que posteriormente a su redacción y ratificación por parte de los Estados miembros se esté pensando en ignorarla por ley, mediante perversos argumentos que pretenden su violación disfrazada de terapia me parece un insulto a la dignidad de todas las personas para las que se redactó, personas para las que esta Convención supone un rayito de esperanza para tantos siglos de oscurantismo, paternalismo e institucionalización.

Seguiría escribiendo argumentos contra el TAI, pero me daría la sensación de repetirme. En realidad ya lo estoy haciendo, pero la pedagogía es disciplina lenta, que necesita de la técnica de la repetición para consolidar sus objetivos. Mi objetivo es que quede claro que el TAI no es una medida terapéutica, sino represiva. Represiva de estados mentales que no siempre son tan terribles como se ven desde fuera, pero también represiva de derechos y libertades, represiva de alternativas científicamente progresistas, represiva de los elementos mínimos de cualquier terapia que se precie de serlo, uno de los cuales, si no estoy mal informada, es la alianza terapéutica.

Aliarse contra el TAI es una buena alianza terapéutica.

sábado, 10 de diciembre de 2011

Qué bonitos son los preámbulos

Ley 26/2011, de 1 de agosto, de adaptación normativa a la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad. (Publ. en BOE el Martes, 2 de Agosto de 2011)


PREÁMBULO

La Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad y su Protocolo Facultativo fueron aprobados el 13 de diciembre de 2006 por la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU). Ambos son tratados internacionales que recogen los derechos de las personas con discapacidad, así como las obligaciones de los Estados Partes de promover, proteger y asegurar tales derechos.

Resultado de un largo proceso en el que participaron varios actores: Estados miembros y Observadores de la ONU, Cuerpos y organizaciones de especial relevancia de la ONU, incluido el Relator Especial sobre Discapacidad, Instituciones de derechos humanos nacionales, y Organizaciones no gubernamentales, entre las que tuvieron un papel destacado las organizaciones de personas con discapacidad y sus familias, muy señaladamente las españolas, esta Convención supone la consagración del cambio de paradigma del enfoque de las políticas sobre discapacidad. Supera definitivamente la perspectiva asistencial de la discapacidad para abordar una basada en los derechos humanos.

Se pasa así a considerar a las personas con discapacidad plenamente como sujetos titulares de derechos y no como meros objetos de tratamiento y protección social.
En este sentido, la Convención, situando de modo integral a las personas con discapacidad como sujetos de derecho, establece que sus demandas y necesidades deben ser cubiertas de forma que puedan alcanzar la igualdad de oportunidades con respecto al conjunto de los ciudadanos. Y, tomando en consideración la perspectiva de las capacidades diferenciadas y la diversidad funcional de una importante parte de la población mundial, que se estima en 650 millones de personas, un diez por ciento de los seres humanos, se pretende adicionalmente incorporar a la sociedad su talento y sus valores.

Para ello se establecen como principios generales el respeto a la dignidad inherente a la persona, la autonomía individual –incluida la libertad para tomar las propias decisiones–, la independencia de cada ser humano, la no discriminación, la participación e inclusión plenas y efectivas en la sociedad, la igualdad de oportunidades, el respeto por la diferencia y la aceptación de las personas con discapacidad como manifestación de la diversidad y la condición humana.
La discapacidad queda configurada como la circunstancia personal y el ecosistema social resultante de la interacción del hecho diferencial de algunas personas con un entorno inadecuado por excluyente en tanto en cuanto que establecido según el parámetro de persona «normal». En ese sentido, una sociedad abierta e inclusiva ha de modificar tal entorno solidariamente para acoger a las personas con discapacidad como elementos enriquecedores que ensanchan la humanidad y le agregan valor y debe hacerlo tomando en consideración la propia intervención de las personas con capacidades diferenciadas. Para ello, adicionalmente, la Convención se constituye en el primer tratado internacional que regula la importancia de la participación de la sociedad civil.

España ratificó la Convención y su Protocolo Facultativo el 21 de abril de 2008, y entró en vigor el 3 de mayo de ese mismo año. A partir de este momento, y conforme a lo establecido en el apartado primero del artículo 96 de la Constitución Española de 1978, forma parte del ordenamiento interno, por lo que resulta necesaria la adaptación y modificación de diversas normas para hacer efectivos los derechos que la Convención recoge.

El texto constitucional, al regular en su artículo 49 la atención a las personas con discapacidad, se inspiró en el modelo médico o rehabilitador, predominante en el momento de su aprobación, el cual consideraba la discapacidad como un problema de la persona, causado directamente por una enfermedad, accidente o condición de su salud, que requiere asistencia médica y rehabilitadora, en forma de un tratamiento individualizado prestado por profesionales. La presente Ley, de acuerdo con la Convención, supera este modelo médico asumiendo la perspectiva social y de derechos y capacidades, que configura la discapacidad como un complejo conjunto de condiciones, muchas de las cuales están originadas o agravadas por el entorno social.

La modificación normativa objeto de la presente Ley encuentra su fundamento en el artículo 4 de la Convención, en virtud del cual los Estados Partes se comprometen a adoptar todas las medidas legislativas, administrativas y de otra índole que sean pertinentes para asegurar el pleno ejercicio de todos los derechos humanos y las libertades fundamentales de las personas con discapacidad sin discriminación alguna por motivos de discapacidad.

martes, 6 de diciembre de 2011

No sé si cortarme las venas o dejármelas largas

Tenemos circo de nuevo en el mundo legal de la salud mental, parece el estribillo de una canción, pero no lo es. Se trata de una nueva amenaza de implantar el Tratamiento Ambulatorio Involuntario, aprovechando que la Janssen saca la moda otoño-invierno en antipsicóticos. Para que la campaña del nuevo producto resultase impecable, sobre todo en cuanto a efectividad y garantía de mucha venta, se le ha ocurrido contar con un señor del tipo importante, un presidente de algo en esto de la psiquiatría, uno que manda bastante, resumiendo. Y bueno, el caso es que este señor ya salió en un par de periódicos anunciando a bombo y platillo la conveniencia de ir pensando en la medicación obligatoria (¿se refiere al nuevo producto, o a cualquiera de ellos?), para los enfermos muy graves. Ay, no sé, estas cosas siempre me dejan mal cuerpo, es que soy una quisquillosa con esto de los derechos humanos, las convenciones internacionales, la igualdad con los otros pacientes y la igualdad con su derecho a decidir. Pues entonces nada, que me he puesto a pensar en todo esto de los derechos y se me vino a la cabeza, ay qué tonta, mira tú qué cosas se me ocurren, pues que hace unos añitos había pasado algo parecido,¿no?, ¿te acuerdas? que sí, caray, si hablamos de eso un montón, con un anteproyecto de ley de esos que hay que votar que si sí que si no y que me parece que hablaba de lo mismo. En Cataluña, sería?, o en Alicante? que ya me lío, que mal tengo la memoria, mira que si me quieren medicar para la memoria, con lo que a mi me gusta olvidar...ay, señor, qué tiempos estos, todo son disgustos, caramba, que no hay día que no se levante una con la cabeza como un bombo, que si comer hoy, que si comer mañana, que si remendar la ropa para que aguante otro poquito,que si estudiar para ser alguien de provecho, como si no tuviera yo bastante con tanto lío ahora me tengo que preocupar con la liga del TAI, que si los jerónimos, que si los neuros, que si darle las gracias a antonio por sus ocurrencias, bueno, nada, cosas mías. A ver si me aprendo estos líos del ordenador para hacer las tablas esas tan monísimas de rellenar, gráficos me parece que le llaman, para ir viendo la progresión de las adicciones, no carays, adhesiones, ay, parece mentira que tenga tanto estudio en la cabeza pa qué, para liarme cuando me pongo nerviosa, y es lo que tiene estudiar, que luego no haces la o con un canuto con tanta abstracción, tantas humanidades y tantos viajes al espacio-tiempo.¡Coño!¡Claro! ¿y si me voy de viaje para adivinar el futuro? bueno, no sé, me viene fatal la verdad, pero maldigo con la boca pequeña a los aplastadores a sueldo de libertades ajenas, e invoco a las brujas herejes a levantarse una y mil veces contra los inquisidores de las calmas tan duramente conquistadas sobre sustos y sobresaltos y lo que nos queda, madre mía, lo que nos queda por aguantar hasta poder dormir tranquilas, a salvo de salvadores de tal calaña. Daba yo la mitad de mi reino, que no es mucho suponer, por ver cumplidos mis sueños de una nueva derrota del TAI, porque del lado de los adoradores de falsas soluciones fáciles estuviesen cuatro pringados venidos a más, frente a una enorme lista de usuarios, asociaciones y profesionales, juntos o mezclados, que dijesen NO de nuevo, alto y claro, y para que conste.

Comienza la función. Se ruega no permanecer en silencio.

sábado, 3 de diciembre de 2011

Sobre mundos paralelos

Físicamente es todo igual, simbólicamente es todo distinto.
Es como ese anuncio antirracista: somos diferentes, somos iguales.

El truco está en saber que habitas varios mundos, y que tienes la capacidad de saberlo y elegir. Como un videojuego interactivo, eliges pantalla. Sabes que hay pantallas más peligrosas que otras. A veces la adicción al juego puede llevarte sin querer a subir y subir la intensidad de la pantalla, te has vuelto sólo juego y no atiendes a nada más. No lo recomiendo.

Invitar a jugar a otros, aunque no es fácil, tiene sus compensaciones. A fuerza de que los demás reconozcan su pizquita de locura, jugando contigo, puedes descargarte un poco. Es de buenas personas repartir su riqueza, tanto si lo que sobra es locura como lo contrario.

Además, ya está bien de que sólo a nosotros se nos exija continuamente conciencia de enfermedad. ¿No quedamos en que, en salud mental, si hay conciencia de enfermedad ya no hay enfermedad? Reconocer un delirio debería ser información suficiente para que el psiquiatra de turno reconociese que estás como una rosa. Reconozco que deliro, luego es imposible que efectivamente delire.

Volvamos al reparto de sensibilidades. Tanto si estás convencido del principio de realidad absoluta que rige todo lo que te rodea como de lo contrario, estás como una cabra, permíteme que te diga. En este caso, la moderación no ayuda mucho, pongamos que te situas en el comedido medio y optas por determinar que sólo la mitad de lo que te rodea es cierto, y la otra mitad no lo es. Sigues estando como una cabra.
Mi profe de filosofía dice que esto es la posmodernidad: donde esté un gran argumento, a la mierda con los grandes principios. Y lo dice con franco desprecio a la posmodernidad, pero lo dice.

John Cage dice otras cosas. No seré yo.



sábado, 26 de noviembre de 2011

Psiquiatría postcolonial

"Allice Bullard, en un reciente artículo,ha sostenido que el rechazo y desprecio a los conocimientos y costumbres, a la cultura, de los pueblos colonizados, contraponiendo la racionalidad occidental a la superstición norteafricana, descalificaba las visiones positivas de la enfermedad mental existentes en las sociedades del Norte de África, que consideraban a los locos seres elegidos por la divinidad y, por tanto, santificados y fuentes de santificación y purificación; de ahí que se considerasen como purificadoras las relaciones sexuales con los locos. Por ello, no eran excluidos de la vida social ni recluidos en asilos.
Desde la perspectiva médica francesa se miraba con recelo a los hombres y mujeres de una sociedad en la que los locos deambulaban por las calles y los ciudadanos se degradaban con la pretensión de mantener contactos sexuales con los alienados. Esta importante fractura entre la cultura de la locura sacralizada y la de la locura medicalizada evidenciaría, según Bullard, las diferentes estructuras sociales y culturales y sus des(encuentros), entre los que cabe citar las importantes diferencias en la consideración de la sexualidad en relación a la locura, que no parecían ofrecer ventajas para los enfermos mentales tratados por la medicina occidental, si tenemos en cuenta las concepciones sumamente represivas de los psiquiatras europeos. Pero, como bien señalaba Foucault el poder tiene estrategias
que muestran y estrategias que ocultan, con el fin de justificar la posesión del poder por parte de unos y la desposesión por parte de otros; velar las experiencias y el entendimiento de la locura que no estuviesen sujetos a las normas de la nueva psiquiatría occidental fue una operación esencial en este ámbito."

Género, mujeres y psiquiatría: Una aproximación crítica
Mª José Ruiz Somavilla e Isabel Gimenez Lucena(Historia de la Ciencia, Universidad de Málaga)Publicado en Frenia, revista de Historia de la Psiquiatría

A partirse el eje, científicos sin complejos

Delirantes noticias de la prensa seria, llevamos así toda la vida.


http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/science/newsid_3234000/3234933.stm

http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/science/newsid_1450000/1450672.stm

http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/science/newsid_1230000/1230837.stm

http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/science/newsid_3996000/3996637.stm

http://news.bbc.co.uk/hi/spanish/science/newsid_3822000/3822853.stm



Y yo sufriendo en silencio.
Si me dan a elegir, me quedo con el de los olores, aunque el gen wikiliks ese mola un mazo, me lo pido para reyes.

Siglo XVIII. Textos para la historia de la prevención de la psicosis

Prevención diante dos posibles arrebatos místicos.

[...] Hay algunas almas tan araganas que, por no trabajar con su entendimiento en la oración, se quedan sólo mirando con la imaginación la misma figura
o imagen que corpóreamente les representa. Y como sea dicha alma de viva imaginación, en demasía, formará en ella misma un retrato de lo que quiera tan a lo
vivo, que puede ser diga que ya tiene visiones. De aquí proceden los muchos enga-
ños que han hecho tanto daño, no sólo a la misma alma que tal piensa o imagina,
sino también a otras; que no son las tales visiones y apariciones sino representadas
de su viva imaginación. Que bien tienen que hacer los Padres espirituales que las
gobiernan en deseimpresionar a las tales que creen se les aparecen Ángeles en
figura corporal, santos difuntos de la otra vida y cosas semejantes. Que como la
imaginación nunca la podemos deshechar de nosotros, tenemos muy a la mano el
pintor que nos pinte las figuras que queremos; y más fácilmente nos dejamos enga-
ñar que los hombres en dichas materias, por nuestra rudeza, muchas veces, y porque no tenemos letras para saber distinguir en lo que es de nuestra imaginación o
lo que es representado por el ángel bueno o malo. Y una vez que se impresione el
alma de que aquello que ve con los ojos de la imaginación es cosa de la otra vida
y, si juntamente no es rendida y dócil, no costará poco el sacárselo, dada su viva
aprehensión, de la cabeza.


Edificio Espiritual, escrito por Me. María Antonia de Jesús,
“A Monxiña do Penedo”, 1700-1760, Santiago.


Textos para a Historia das Mulleres na Galicia, María Xosé Rodriguez Galdo(coord.)Consello da cultura galega, 1999

Textos de allí sobre temas de aquí

Hago eco del interesante texto que difunde el compi bloguero de Psicología Crítica:

http://www.lahaine.org/index.php?p=57721

Pues nada, a seguir pensando.
(A cabeciña non para)

miércoles, 23 de noviembre de 2011

Trastorno de la imaginación

El título no es mío, se lo tomé prestado a un usuario del blog Saltando Muros, que lo propuso como alternativa al término "Esquizofrenia" en un comentario reciente. No está nada mal. Desde aquí le doy las gracias por servirme de inspiración para esta entrada. Si mi blog siguiese enlazado en esa página, le resultaría más fácil a esa persona acceder a mis agradecimientos desde allí, pero como no es el caso, pues que alguien reparta suerte y pueda, de alguna forma, llegar hasta aquí, ya que es la continuación de una conversación, o así lo entiendo yo.

Trastorno de la imaginación... supongo que tener imaginación ya es un trastorno en sí mismo, entendiendo trastorno como algo que nos causa dificultades de adaptación al medio en que nos movemos. Si además esa imaginación se dispara, acompañada de autosegregación de potentes sustancias sólo en parte reprimibles o modificables con otras de origen sintético, la diferencia con el ciudadano medio puede ser abismal. Lo normal es que uno tenga que pagar por colocarse. En ese sentido, no se preocupen, nosotros, los autocolocados, también pagamos, a veces nos hipotecan de por vida, con esa etiqueta llena de reminiscencias...lo dejamos aquí.

El cambio de nombre, como sabéis, vino de los japoneses, tan sagaces siempre, que pensaron que esquizofrenia, para ser sólo un nombre, era bastante feo. Si el asunto estaba en renombrar, propusieron renombrar como "trastorno de integración", y en mi humilde opinión, lo clavaron. Ahora que este amable y sensible lector del mencionado blog propone otro, al ponerlos juntos, no sé por cual decidirme. El japonés parece más científico, más multidisciplinar (vertiente biopsicosocial, como dios manda). El "trastorno de la imaginación" tiene de poético lo que tiene de triste. La poesía es triste, siempre es ausencia y nostalgia de conocimientos mágicos, siempre es reconstrucción imperfecta de batallas casi perdidas, o nostalgia de futuro, de todo hay, tantos poetas como poetas.

Lo mejor es cuando usas el nombre para cualquier cosa menos para quejarte. Es más común que se quejen los otros. Al final son los otros los que más se molestan con tu falta de lo que sea, o con las sobras, también los hay que se molestan si te sobra algo. Particularmente, soy experta en el ciclo euforia y cansancio. Puesto que de cansancio vamos todos sobrados, no viene mal un poco de euforia para llevarlo mejor, sobre todo si la euforia es alegre y va asociada a la fiesta. Ahí es cuando vienen los nombradores y dicen "bipolar". Con todos los respetos, es un decir, me parece el nombre más cutre del mundo. Me daría mucha más vergüenza ir por ahí saliendo del armario como bipolar. Me suena a forro polar, a polo de naranja, a unidad informática preinternética. No quiero que se me malinterprete, los llamados síntomas nunca son cutres, faltaría más, cada uno sabe por lo que le toca pasar, le llamen como le llamen pero el nombrecito se las trae. Bien pensado, lo que empieza por esquizo (escisión, corte, división) no avanza mucho, en todas partes se masca el dualismo maniqueo, todo eso que les permitimos a los demás por la vía del Reconocimiento del Otro: Estoy entero porque no estoy dividido, soy de una pieza porque no soy "Bi", estoy centrado porque no viajo de un polo a otro. Bueno, de ilusión también se vive. Y de la imaginación también se come, varias veces al día.

domingo, 20 de noviembre de 2011

Salud mental, un concepto transversal.

La salud mental(*) está por todas partes, lo atraviesa todo en frenéticas diagonales. Allí donde te paras a pensar, está la salud mental haciendo de las suyas. Vamos a hacer un repasito:

- Trabajo: mi jefe me odia, mi jefe me exprime, mi jefe no me paga, mi jefe me despide, mi jefe me asciende, mi jefe me amenaza con despedirme o ascenderme... Ahí tenemos a la salud mental, al rescate, solícita, en cualquiera de las situaciones anteriores, en cualquiera de sus fases. SIEMPRE hay una pastillita para cualquier cosa.

- Estudios: No me dan la beca, no me llega el tiempo, no entiendo, no avanzo, no rindo, no hago amigos, no sé para qué sirve lo que estudio...SIEMPRE hay una pastillita.

- Pareja: Me quiere, no me quiere, me entiende, no me entiende, me celo, me cela, me aburro, se aburre, me grita, no me habla... SIEMPRE hay una pastillita.

- Familia...y otros colectivos. SIEMPRE hay una pastillita.

La salud mental es como el cine, hay pelis comerciales, independientes, clásicas, experimentales, superproducciones, pelis de bajo presupuesto y autoproducciones caseras. Tiene mucho de arte, no siempre lo más caro o lo más famoso es lo mejor, aunque sea lo más consumido o de lo que más se habla.

La salud mental es como la gastronomía, varía por zonas geográficas, hay denominaciones de origen, comida rápida, recetas tradicionales, secretos que se llevan a la tumba, dietas hipocalóricas, entrantes, platos fuertes, postres dulces...

La salud mental es como la música, te acompaña, te arrastra, te seduce, te raya, te conmueve, te da dinero, bolos, disgustos, mucho trabajo y mucha disciplina, te abre la mente, te pone en órbita, te ayuda a hacer amigos, y lo mejor de todo, es que no se acaba nunca.

La salud mental es como el amor, puede salir bien, puede salir mal, pero va a depender del concepto que tengas, de si lo ves como algo totalmente ajeno a ti, como un determinismo sobre el que no tienes control, o como un arte con todo por hacer, con modelos o inspiraciones, pero con firme vocación de encontrar un estilo propio.








(*) Salud mental: moderno eufemismo de lo contrario.

martes, 15 de noviembre de 2011

Salir del armario

Cada vez me cuesta menos. Me lo ponen en bandeja. Se empieza a hablar más de estas cosas, con criterios intuitivos, sin formación específica pero que distinguen dónde está el problema. Entonces aporto mi historia y fluye la conversación, coge velocidad.

Luego intercambiamos información, teléfonos, direcciones web, hablamos de proyectos y la receptividad es estupenda. La crítica también, casi se oye cómo el estigma hace plop, como una pompa de jabón. Rescatamos a Foucault, estamos en la universidad, cualquier disculpa es buena para debatir sobre todo aquello que molesta. Fuera de horario lectivo, por supuesto. Dentro todo sigue igual, o peor de lo que recordaba. Todo más caro, más técnico, más infantilizado. Me quiero ir todo el rato, pero aún no me decido. Es casi una cuestión de resistencia, aunque no me la pueda permitir, sale carísima. Al no dejar espacio para nada que no sea servir al plan académico (clases presenciales, trabajos latosos continuamente, quedadas para los trabajos en grupo)hace falta ser muy rica, o tener una gran práctica como pobre, para vivir del aire. Mi caso es el segundo, y la generosidad que me permito aceptar es limitada, tampoco sé si compensa.

Se me ocurren tantas cosas para hacer ahora que no tengo tiempo para hacer ninguna... Este estado me suena, ya me pasó más veces. Meterme en líos, para que luego el tiempo libre me sepa mejor.

Mientras tanto estamos creando, por fin, grupo de autoapoyo, para empezar, y también estoy en otro feminista, para ir enlazando unos problemas con otros, ya que ser mujer se parece bastante a estar loca, sobre todo si te das cuenta.


Cuando los locos seamos más
los locos serán ustedes


(pintada callejera)

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Maquinitas por la gran ciudá

Contando los pasos que pisan las piedras mojadas, me duele la espalda de cargar con la carpeta, y a mi edad los huesos ya no están para muchos resfriados. Humedades, las justas, y eso sí, chorreando cuando toca...bailar bajo el agua o como el agua, muele que muele, si tus ojillos fuesen fuentes de agua de la rica de beber, la de abrirse como una flor y regar el mundo con ganas de reír...y llorar, a la vez, que es cuando más rico está. Alguien me dijo hace poco, tú es que eres bipolar, y yo le respondí, mande usté decir que a mi ya nada me importa, y menos las etiquetas de temporadas pasadas, de moda y de rosca. Yo es que ya me liberé hace tiempo de aquello de ser algo, y todos los días me pregunto bien temprano qué pasa hoy, me ducho primero o en cambio desayuno, a según pa qué, todo bien mientras no tenga que salir corriendo sin lo uno ni lo otro. Bi ¿qué? Bien pensado no es muy grande esta ciudad, todavía le quedan un potorrón de árboles, cosa de las tierras generosas en lluvias, las que dejan que el agua siga su caminito de plop plop plop y gore tex carente de la capa correspondiente a la impermeabilización especialmente necesaria en este invierno que se presenta largo, demasiado largo.

Propuestas para el debate (algunas muy polémicas)

Los trabajadores van al psiquiatra en lugar de ir al sindicato.(Paco paquete dixit)

Las feministas se asocian para hablar de economía, establecen redes solidarias, debaten todo lo debatible y cada vez más incluyen la antipsiquiatría en la agenda, conscientes de que la solución a sus problemas no es la medicalización de los mismos.

De la lucha obrera se habla con nostalgia, se la entregaron a los sindicatos.

Del feminismo se habla con cierta envidia, no paran las locas estas.

Si todas las mujeres fuesen feministas, seríamos mayoría absoluta siempre.

Si todas las mujeres no son feministas es porque la propaganda antifeminista funciona muy bien, y ya sabemos de dónde viene.

Cuando las feministas se han solidarizado con otras luchas, siempre se les dijo que lo suyo podía esperar.

Cada vez que avanza el feminismo, avanzamos todos.

Hay pocos problemas que no tengan que ver con los valores del patriarcado, desde la guerra hasta el capitalismo salvaje que amenaza con dejarnos sólo dinero para comer.

lunes, 7 de noviembre de 2011

Locas

Lo que yo tengo no es esquizofrenia (bueno, eso ya lo sabía, resulta difícil poseer lo inexistente, lo inaprensible, lo que es puro nombre al servicio exclusivo del nombrador)

No era esquizofrenia, pues. Si me tuviera que diagnosticar a mí misma, diría que, tras los detalles observados, tengo un adelanto foucoultiano de tres pares... de libros. Todavía no he leído a Foucault, pero hay algo en sus microfascismos que siempre me rondó la cabeza, esas cosas de la transversalidad del poder, su ubicuidad... Antes de seguir, me gustaría recordar, para quien no lo sepa, que la filósofa Kate Millet, esa que dijo aquello de que Lo personal es político, se le adelantó un poco al señor francés. Pero eso lo sabe poca gente, Kate Millet era una señora pensadora feminista, y ya se sabe que el feminismo es cosa de locas. Luego ya si te paras a pensar en algunas chorradas que podemos hacer las mujeres (votar, tener propiedades, hablar en público, divorciarnos, abortar, estudiar, trabajar fuera de casa....)resulta que todas se las debemos a las locas esas.

Así que la próxima vez que nos acordemos de la cantidad de cosas que hacen a nuestro alrededor todas las mujeres que conocemos, así como de las que todavía no pueden hacer, especialmente por el mundo global de alrededor...pensaremos que hay tipos de locura que hacen más falta que otros, y que nunca son suficientes. Los derechos conquistados saben distinto que los que simplemente se escriben sobre un papel que hemos leído por ahí. El feminismo, como locura que es, se lleva puesto, también es transversal y está siempre alerta, no porque tenga su deriva paranoica, que puede tenerla si nos dejamos llevar por el sensacionalismo con el que se han tratado las agresiones a mujeres, sino porque los mecanismos que lo activan son espesos y difusos,y pueden crecer en cualquier parte, como las malas hierbas.

El feminismo es, también, cosa de hombres. Y de niñas y de niños.
¿Por qué no nos volvemos todos locas?

lunes, 31 de octubre de 2011

Abandono responsable del consumo de fármacos psiquiátricos

Aunque el título de esta entrada pueda parecer escandaloso,(no a mí, desde luego, que realicé este proceso hace muchos años), lo elegí porque resume muy bien la temática del libro que reseña el artículo que propongo para hoy. La reseña, hecha desde la perspectiva profesional, es sumamente crítica con el libro en cuestión, como no podía ser de otra manera, sin embargo, reconoce que estas cuestiones darán mucho que hablar en los próximos años, y no se equivocan, creo, en esta "profecía".

Efectivamente, por lo que a mi experiencia respecta, sé que el hecho mismo de contarla provoca debate allí donde la expongo, y debate quiere decir debate, es decir, argumentaciones a favor o en contra, pero que por encima de todo tengan como principio el respeto a la persona y su credibilidad, ya que todos sabemos que la palabra de l*s loc*s no siempre vale lo mismo que la de los profesionales, algo que resulta como mínimo curioso, ya que son l*s loc*s, y no tanto los profesionales, quienes tiene acceso directo a conocimientos sobre los síntomas, los efectos secundarios de las medicaciones, y otros aspectos que los profesionales sólo pueden conocer indirectamente, a través de los discursos de l*s loc*s, o de la literatura profesional, que a su vez también es indirecta, y así hasta el infinito.

No voy a entrar a criticar la reseña, puesto que no leí el libro, y no resulta fácil poder hacerlo a corto plazo puesto que ni está publicado en este país, ni tan siquiera traducido. (A quien esté interesado en traducir/editar, se le agradecería mucho)Pero considero que la reseña, leída entre lineas, sirve muy bien para que se encienda el interés por el libro en cuestión, o no. Aquí os la pongo, en cualquier caso. Como siempre, feliz lectura.


http://scielo.isciii.es/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0211-57352006000100009&lng=es&nrm=

domingo, 30 de octubre de 2011

Convención sobre los derechos de las personas con discapacida...

Un poco de material audiovisual que encontré por ahí. Hay alguna cosa más, si tenéis curiosidad, es todo bastante reciente.


sábado, 29 de octubre de 2011

Amigos y tesoros

Yo no estoy todo lo loca que podría, (por genes, se entiende, estoy dotadísima para los friki-genes) porque tengo amigos, influencias humanas, factores sociocultutrales, que se diría en abstracto, que me lo impiden. Que saben apoyarme sin juzgarme, sin pedirme cuentas, sin necesidad de sobreprotegerme ni tener conmigo ninguna concideración especial (ni para bien ni para mal, por el hecho concreto del escandaloso diagnóstico que arrastro desde hace años). Eso sí, conocen muy bien lo que se llama factores de vulnerabilidad al estrés. Que donde otros, en pleno estrés, mueren de fatiga o irritabilidad, yo muero de viajes a los mundos paralelos, y en eso sí que me cuidan, sin alarmas ni alarmismos. Se dan cuenta antes que yo misma de lo estresada que puedo estar ante determinados cambios, y ahí vienen, diagnostican, y ponen sobre el mantel del picnic los bocadillos adecuados. Unas veces son risas, otras borracheras, otras dinero o paseos por el campo. Vivo en una nube, gracias a ellos, en una nube bonita, me siento protegida sin dejar de sentirme independiente.

Os quiero mucho, mucho, mucho. A tod*s.

viernes, 28 de octubre de 2011

La leyenda del tiempo

Y en la llanura del tiempo, el tiempo le hace creer que nace en aquel momento....
Él soñaba sobre el tiempo flotando como un velero.


martes, 25 de octubre de 2011

Empoderamiento

Habréis oído que hablo bastante de empoderamiento, directa o indirectamente. Este término no es inocente, como no lo es ninguno en el campo de lo social, o de lo político (es difícil distinguirlos, por otra parte) Digo que no es inocente, porque cuando pongo aquí enlaces de leyes, convenciones y demás,a menudo se habla en estas de aumentar el empoderamiento como recomendación para los colectivos discriminados, oprimidos, excluídos de diversos ámbitos de la sociedad, también se les llama colectivos vulnerables...y de muchas formas.

Ahora, la pregunta es la siguiente: ¿Entienden estas leyes lo mismo que entiendo yo cuando se habla de empoderamiento? Probablemente no, o no del todo. De ahí que tenga que oír que se me llame rebelde cuando comento que yo no me tomo la medicación. Rebelde es un adjetivo que me pone quien me ve así, quien ve que estoy cuestionando dogmas, y a quien ese cuestionamiento por mi parte le inquieta, o le molesta, puesto que, de alguna manera, ha interiorizado el dogma como lo que pretende ser, realidad incuestionable.

Resulta sospechoso, como mínimo, que organizaciones internacionales de gran peso pretendan ahora promover el empoderamiento. Primero con las mujeres, ahora con los que llaman discapacitados. Suena a una cierta mala conciencia, o simplemente a que han hecho cuentas, y no les salen. Cuentas sobre lo que les cuesta tenernos en paternalismo perpetuo, y digo cuesta tanto económica como políticamente. Así que ahora, su objetivo es que nos empoderemos, que salgamos del cascarón. Puede que sea así, puede que no. No tengo información suficiente para responder, pero sí las suficientes inquietudes para pensar sobre eso.

Pero de lo que quería hablar hoy es, como dice el título, de empoderamiento. De si estamos hablando de lo mismo cuando lo digo yo, desde las carencias en este aspecto que constato como diagnosticada y amiga de otras y otros diagnosticados, o cuando lo dice un profesional de este tinglado de la salud mental. Un profesional puede ser un psiquiatra o psicóloga, pero también un jurista de políticas públicas, o un relator de la ONU. Creo que la respuesta vuelve a ser no, o no del todo. Y es que tiene que haber una diferencia entre el empoderamiento que cae de arriba a abajo, y el que viaja en sentido contrario.

Sobre esto habla este artículo que enlazo, muy interesante, para que sepamos de qué se habla cuando se habla de empoderamiento. Para que no nos den gato por liebre. Y también para que veáis que cuando hago el paralelismo de nuestra situación con las reivindicaciones feministas, no lo hago en el vacío.





http://www.dicc.hegoa.ehu.es/listar/mostrar/86

lunes, 24 de octubre de 2011

Estudiar sale barato

Es broma. Estudiar, hoy en día, de barato no tiene nada. Pero si no lo medimos en términos económicos, sino xxx:))), por llamarle de alguna forma, resulta que compensa un montón. Se acabaron las horas muertas, el aburrimiento invernal, la apatía, la falta de proyecto. Ahora el problema es otro: ¿cuándo voy a poder no hacerlo? ¿cómo me organizo para hacer algo distinto, digamos un día entero? Está complicado.

Así que de momento no tengo nada que contar, hasta que no resuelva este dilema.

Bueno, sí. Podría contar que por primera vez en los últimos años, el otoño ha dejado de ser un factor de riesgo de activación de viajes. Y no será por falta de lluvia, que por cierto estaba haciendo mucha falta. Digamos que lo de estudiar forma parte de un plan de prevención intensiva, con perspectiva ¿bio?-psico-social. (Lo de bio se acepta si viene de biográfico, si no que me demuestren la ausencia de fertilizantes biologicistas)





http://www.msps.es/organizacion/sns/planCalidadSNS/pdf/Declaracion_Empoderamiento_OMS.pdf

(Del dicho al hecho hay un trecho, pero hay partes chulísimas que te mueres, de emoción, o del susto, según cada cual. Feliz lectura)

miércoles, 19 de octubre de 2011

Justicia y discapacidad

En el mes de mayo, creo recordar de la lectura rápida de este artículo, tuvo lugar un seminario para formar a los trabajadores de la justicia (jueces, juristas, abogados...etc)sobre discapacidad y derechos humanos, porque se ve que hacía falta.

Más que nada porque la famosa convención internacional de la discapacidad por fin reconoce que somos personas iguales ante la ley, y había que explicárselo bien a los señores de las togas, para que no se pierdan ni se queden antiguos.

Me llama la atención que los ponentes principales son argentinos, porque se rumorea que en Argentina se lo creen (lo de que somos iguales), y a ver entonces si vienen a dar una vuelta y lo explican (y que lo expliquen bien, porque parece complicado). Vinieron y explicaron, quién faltó a clase que pida los apuntes.


http://www.observatoriodeladiscapacidad.es/informacion/eventos/13966




Luego ya viene lo de siempre, políticas públicas y crisis. Sí, crisis y todo lo que quieras, pero haberlas haylas (o viceversa, que luego me acusan de ilusa)

martes, 18 de octubre de 2011

Loca por estudiar

Derecho a la educación (Gratuita y universal).

Estoy bastante loca por haber estudiado mucho(entre otras cosas), y me vuelve loca seguir haciéndolo, estaba loca por volver, la verdad. Así que estoy haciendo un máster del universo, de esos de la universidad. Por supuesto, con todas las limitaciones de mi cerebro deteriorado debido, fundamentalmente, a mi falta de conciencia de enfermedad, y a que no me tomo la medicación, signo inequívoco de que estoy peor de lo que pienso.

Estoy fatal, echo de menos la euforia y la sensación de fantasía. Echo de menos creerme que pasa algo especial, que tengo la intuición a flor de piel. Y sin embargo elijo estudiar para mantenerme despierta, pegada a la pantalla del ordenador elaborando recensiones de artículos filosóficos, históricos y sociales con metodología cualitativa. Ciencias sociales cuya orientación actual afirma ser humanista, interpretativa, con vocación de influír y mejorar el medio social.(¡A la mierda el positivismo científico!) Ahí vamos, por mí que no quede.

Metas que tienen que ver con el proceso y sus satisfacciones. No hay caminos para la salud mental, la salud mental es el camino. Si alguien coacciona o manipula a sus pacientes para que no lean o que no estudien, debería ser denunciado por negar el derecho a la educación. Luego se llenan la boca con discursos contra el estigma.

Derecho a la libertad de expresión.

Derecho a la elección del tratamiento.

Reivindicaciones y absorciones

Hay mecanismos que se repiten a lo largo de la historia, y en cuanto a reivindicaciones ciudadanas, me llama la atención cómo los políticos reaccionan casi siempre igual a determinados movimientos ciudadanos:

- El movimiento ciudadano lanza una reivindicación/es.
- Los políticos la ignoran, la minimizan o directamente criminalizan a los que la expresan.
- El movimiento ciudadano persiste en su reivindicación, y se hace más fuerte, más numeroso, hasta llegar a crear opinión pública en torno a esa reivindicación/es.
- Los políticos, ante la fuerza creciente del movimiento, empiezan a escuchar, no les queda otra, se juegan los votos, que es lo que les permite ser políticos y vivir de eso.
- De escuchar pasan a intentar negociar.
- En la negociación, siempre van a ofrecer menos de lo que pide el movimiento. Es la fase de regateo.
- Tras el regateo, a veces el movimiento cede y se traduce en algún acuerdo, ley, etc (se me ocurre el ejemplo de los sindicatos, negociadores profesionales, con tendencia a conformarse pronto, salvo honrosas excepciones)
- Tras el regateo, o si no hubo regateo porque el movimiento se niega a negociar, a veces el movimiento no cede ni un ápice, pero la opinión pública sigue ahí, y ya es imposible obviar la reivindicación...
- En este último caso, el partido político en cuestión presenta la reivindicación y su posible cauce como un mérito suyo, lo incluye en el programa electoral y, si gana las elecciones y se hace efectiva, se cuelga la medalla en el espacio de lo "Histórico" (espacio más proclive a dejar constancia de los méritos de los políticos profesionales que de los movimientos ciudadanos)


Probablemente no sea siempre así, la cosa varía mucho si el movimiento reivindicativo es violento o si el sistema "político" es una dictadura. Pero en los movimientos de metodología pacifista, educativa y de marcado carácter social, sí que se me ocurren unos cuantos ejemplos de por aquí cerca:
- Movimiento feminista
- Movimiento LGTB (conocidos, entre otras cosas, por plantearle reivindicaciones a la misma profesión psiquiátrica, demostrando así la carga ideológica de la profesión)
- Movimiento contra la guerra de Irak (y mucho antes, el movimiento de la insumisión y de la objeción de conciencia al servicio militar obligatorio)

Ahora queda la cuestión de si lo más importante es que la reivindicación vaya adelante, o que se reconozcan los méritos. En mi caso, el tema de los méritos es claro y diáfano. En cuanto a la reivindicación "robada", suelo observar que crea en el movimiento impulsor un cierto júbilo paralizador de ¡prueba superada!, que se traduce en relajamiento de la actitud reivindicativa y filiación emocional con el partido agenciador, un Síndrome de Estocolmo de baja intensidad.

La cuestión de qué es más importante sigue ahí. Para mi son importantes ambas cosas, y no deberíamos tener que elegir. Es importante que se avance en derechos, y que esos derechos vayan al papel, pero también que bajen del papel a la calle, a la vida de las personas. Muchas veces, el Síndrome de Estocolmo instala en las personas pertenecientes al movimiento un chip autocensurador, que no les permite criticar al partido agenciador por pensar que se está en deuda con él, cuando en realidad es al revés, es el movimiento el que permite al partido reciclarse y avanzar, e incluir progresos sociales que luego, efectivamente, le granjearán más votos.

Esta reflexión viene a cuento de confusiones y ensaladas ideológicas que vengo observando en los últimos años. Quizá ahora, con todo esto del cambio del mundo mundial, me han vuelto a la cabeza.

sábado, 15 de octubre de 2011

Disability

Si os acordáis, disability hace referencia a las limitaciones sociales que resultan no de ningún hecho biológico asociado a la discapacidad, sino del medio social y el nivel de hostilidad, rechazo, estigmatización...etc que la sociedad, en forma de barreras de todo tipo, le pone a las personas "con discapacidad". Hablamos del modelo social de la discapacidad, o dicho con más propiedad, de la diversidad funcional.

Todas las personas tienen, o pueden tener, dificultades en algún aspecto, y formas de funcionar diversas a muy diversos niveles, sean estos físicos, psíquicos, sociales, sexuales, intelectuales, y lo que se os ocurra. A todas las personas se les dan mejor unas actividades que otras,y todos poseemos habilidades muy diferentes, que se desarrollan o se limitan por todo tipo de causas, estén estas relacionadas con los gustos, el aprendizaje, la motivación, los accidentes, los traumas, el entorno socioeconómico, el cuerpo...

En el caso de la diversidad funcional, sucede un hecho curioso ,desagradable y discriminatorio, que consiste en que la diversidad funcional concreta de una persona o grupo de personas, da lugar a categorías sociales con valor identitario impuesto desde fuera (tomar a las personas que comparten esa diversidad funcional como masa indiferenciada, como personas a las que se "identifica" por ese rasgo o rasgos, negándoles, en esa identificación, el resto de sus potencialidades como persona, resultando así intercambiables en el imaginario colectivo, lo que da lugar a todo tipo de prejuicios que empiezan siempre con la misma frase : "Los locos/cojos/ciegos...SON...." como si cada uno de ellos sólo pudiera SER en base a ese único rasgo, que definiría toda su personalidad y espectativas vitales, frente a los individuos en general, los cuales, no siendo eso, pudieran ser, por tanto, todo lo demás.

La construcción social de tales prejuicios identitarios constituye, sin duda, uno de los innumerables ejemplos del concepto "disability", sobre el que estoy pensando estos días. Se me ocurren ejemplos en el trato de algunos profesionales a sus pacientes, de algunos familiares, de algunos amigos, de cómo el entorno social y las actitudes hacia una misma persona pueden cambiar a partir de un diagnóstico psiquiátrico, por ejemplo. Cómo ese entorno construye, la mayoría de las veces más desde la ignorancia que desde la maldad, una coraza "deshabilitadora" (traducción nocturna e intuitiva)que no puede menos que influir negativamente en la recuperación de la persona diagnosticada, que se ve "identificada" por ese rasgo, y desposeída por tanto de su diversidad como individuo.

La deconstrucción es el proceso por el cual detectamos en base a qué tipo de discursos o creencias nos relacionamos con determinada realidad. La toma de conciencia es el primer paso de la deconstrucción, es la creación de su necesidad. La necesidad de deconstruir nace de la necesidad de crear realidades nuevas, relaciones nuevas, posibilidades de usar otras lentes para enfocar la realidad. En griego, teoría quiere decir VER, así que toda teoría es una lente, una perspectiva, una forma de observar. Cuantas más teorías conocemos, más posibilidades tenemos de acercarnos a realidades complejas con actitud crítica, es decir, con criterio. Lo contrario es que nos impongan pensamientos únicos, y nos pillen sin capacidad para detectarlos, como únicos y como impuestos.

viernes, 14 de octubre de 2011

Igualdad vs Identidad

" El poder, como es obvio, lo es siempre de grupos y no de individuos aislados: sólo los miembros de grupos pueden potenciar sus acciones mediante las de otros para ejercer prácticas concertadas que puedan controlar el espacio social y amplificar el radio de su incidencia. pero a su vez, sólo en los grupos entendidos como pactos para objetivos concertados hay individuos, centros de imputación que son los sujetos del pacto ("sujetos políticos")." (*)

Estos individuos, en tanto que tales sujetos políticos, constituyen el espacio de la Igualdad, aquel donde los individuos, en tanto que tales, se constituyen en grupos como sujetos de derecho.

Frente a la Igualdad tenemos la Identidad, espacio de l*s idéntic*s, masa indiferenciada, donde no puede emerger la individualidad.

"Identidad, pues, no es lo mismo que que igualdad. Identidad es indiferenciación, mientras que igualdad, por el contrario, es una relación de "equivalencia" y "equipotencia" entre quienes, por ser individuos, son diferentes"(*)

AMORÓS Celia, La gran diferencia y sus consecuencias

martes, 11 de octubre de 2011

Ficción paranoica, ciencia ficción.

Un artículo curioso sobre la paranoia y los géneros literarios. ¿Será que tenemos un escritor en la cabeza que no se conforma con escribir? Me recuerda a una de las primeras entradas de este blog, donde hablaba de los delirios como una posible experiencia del método Estanislawski ( ámbito del teatro, género literario también. Teatro como texto pero también teatro como representación, y ya puestos, realidad como teatro, y viceversa) Vamos, que va a ser que lo nuestro es puro teatro, como decía La Lupe. Y los médicos a darnos pastillas, en vez de darnos trabajo. Hay que ver.

http://www.antroposmoderno.com/antro-version-imprimir.php?id_articulo=1136

domingo, 9 de octubre de 2011

Ley 26/2011, del 1 de Agosto, de adaptación normativa a la Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad

http://sid.usal.es/leyes/discapacidad/16508/3-1-2/ley-26-2011-de-1-de-agosto-de-adaptacion-normativa-a-la-convencion-internacional-sobre-los-derechos-de-las-personas-con-discapacidad.aspx

sábado, 8 de octubre de 2011

Salud mental y derechos humanos

A quien corresponda (¿El Genio de la Lámpara?):

- Nunca más amenaza de TAI (tratamiento ambulatorio involuntario)
- Derecho a la información sobre el tratamiento (efectos secundarios de los tratamientos farmacológicos, entre otras cosas)
- Derecho a elegir el tratamiento (si hay varios enfoques posibles debe haber, también, varias opciones terapéuticas)
- Derecho a rechazar el tratamiento
- Derecho a no ser criminalizada por el mero hecho de haber sido diagnosticada. No ser criminalizada implica que no se me apliquen protocolos basados en la suposición de que puedo resultar peligrosa para mí misma o para los demás
- Derecho a que mi diagnóstico sea revisable y reversible,lo que implica el abandono de la consideración de cronicidad, tanto más cuanto que no existen pruebas científicas ni estadísticas que demuestren tal cronicidad.
- Derecho a la no-discriminación laboral por el hecho de haber sido diagnosticada, cuando ese hecho, el haber sido diagnosticada, sólo demuestra la opinión de un profesional en base a uno de los diferentes enfoques diagnósticos, por tanto no demuestra nada sobre mi capacidad profesional.
- Derecho a la libertad de expresión.
- Derecho a la igualdad de trato en los centros de salud.
- Derecho a la autonomía personal (no ser tutelada ni victimizada)
- Derecho al acompañamiento familiar, o de la persona que yo elija, en caso de hospitalización, en régimen de visitas semejante al del resto de pacientes, sin distinción entre salud física y salud mental.

Algunos de estos derechos están recogidos en la Convención Europea sobre la Discapacidad (2006), otros probablemente no. Muchas personas vinculadas al mundo de la salud mental, y de la salud en general, desconocen este documento. Es hora de ponerse las pilas, no sea que cualquier día se encuentren con que la ley ya no está para darles la razón en todo. En algunas comunidades autónomas, el oscurantismo en el ámbito de la salud mental es verdaderamente preocupante, lo que puede traducirse en impunidad en caso de violaciones de los derechos humanos más fundamentales, como el derecho a no ser objeto de tratos inhumanos ni degradantes. Las personas con diagnósticos psiquiátricos nos estamos organizando, nadie debería sorprenderse si a partir de ahora se multiplica el asociacionismo con finalidad reivindicativa, y no meramente ocupacional. Cuando esto sucede, los estudios de campo, los informes y las denuncias también se multiplican, y la progresión tiende a ser más geométrica que aritmética. El período de tiempo que transcurre entre el oscurantismo y la transparencia puede resultar sorprendentemente corto. Los cambios sociales empiezan por pequeñas acciones de personas también pequeñas, y el efecto bola de nieve acompaña como viento a favor, aún en las circunstancias más adversas, incluso desde el lado de los invisibles más históricos.

El activismo cuántico viene para quedarse. (Esto último me lo contó el Genio de la Lámpara, durante una noche de juerga. Ya íbamos un poco pedo, todo hay que decirlo)

miércoles, 5 de octubre de 2011

Jurisprudencia

Aquel argumento, o argumentos, que definen las condiciones y posibilidades por las que un hecho, acto, relación o lo que sea es susceptible de ser legislado, cómo, por qué, en base a qué, considerando qué, considerándolo como qué, y bla bla bla...

Del manicomio a la psiquiatría comunitaria, (en muchos casos a la recuperación total), del loco como objeto de represión, luego de cuidados, y más en la actualidad (amalgama localista de pasado-presente-futuro), como sujeto de derecho, hay un trecho.
La jurisprudencia explica, entre otras cosas, los movimientos conceptuales (también sociales, cómo no)que se dan a lo largo de este camino.

La ley nace de la costumbre, ahora todo va rápido, hay que irse acostumbrando.

martes, 4 de octubre de 2011

Apuntes (II)

La exclusión social puede provocar psicosis, delirios, y otras cosas.

Un exceso de adaptación a un sistema extremadamente competitivo puede producir los mismos efectos.

¿Los extremos se tocan?

lunes, 3 de octubre de 2011

Apuntes

"En su condición de reverso de un paciente normal, o modelo arquetípico de los manuales de anatomía, el discapacitado es objeto de una serie de procedimientos facultativos que tienen por finalidad precisar la anomalía o disponer los procedimientos terapéuticos para la corrección y óptima adaptación al medio familiar, educativo o laboral. Por el contrario, el más reciente modelo social de la discapacidad asume que se trata de una situación de marginación como resultado de un amplio repertorio de prácticas sistemáticas de exclusión social, de las que la señalización e identificación de la diferencia es una forma específica. Así este enfoque preconiza la distinción entre impairment, anomalía fisiológica objetivable en la persona del discapacitado y disability limitaciones en la participación social como resultado de un medio social poco respetuoso con las personas que han sufrido daño corporal o trastorno fisiológico o mental.

Melania Moscoso (Lo que no somos: una breve reflexión acerca de la discapacidad)

domingo, 2 de octubre de 2011

¿Antecedentes psiquiátricos?

He aquí la noticia: (La voz de Galicia, 01/10/11)

"El demonio me persigue.

Iván Berral Cid, el madrileño de 34 años que mató a Rocío Piñeiro y después se suicidó, tenía un extenso historial delictivo desde los 20 años, pues fue detenido por narcotráfico, resistencia y atentado a la autoridad, lesiones y amenazas. Además, estaba acusado de malos tratos y desde junio sumaba una orden de alejamiento de su pareja, una mujer colombiana y que estaba embarazada. Sin antecedentes psiquiátricos, llevaba meses viviendo en la calle, y alternaba noches en los albergues con otras durmiendo en las aceras. La policía reveló que Berral llevaba el arma escondida en una funda de raqueta de pádel, y que entre sus ropas llevaba «un papel a modo de despedida», cuyo texto no se reveló por estar decretado el secreto de sumario, aunque la Ser informó de que en el escrito decía: «El demonio me persigue»."

http://www.lavozdegalicia.es/espana/2011/10/01/0003_201110G1P2991.htm


La negrita es mía, para señalar lo curioso de esta expresión. Hasta donde yo sé, los antecedentes son penales o policiales. Si ahora también vamos a empezar a escuchar esta otra, se me ocurren unas cuantas cosas:

- ¿Qué sentido tiene esta alusión, si no es relevante para la noticia?
- ¿Reconoce entonces, abiertamente, este periódico que el sistema psiquiátrico ejerce el mismo papel represivo que los otros mencionados? (¿Están los profesionales de la psiquiatría dispuestos a aceptarlo con naturalidad?)
- ¿No es una expresión, en este contexto,altamente criminalizante y estigmatizadora?
- ¿Qué se puede hacer al respecto? (Observatorio de la discapacidad, decálogo de buenas prácticas periodísticas, cartas al director...)

Se agradecen ideas y comentarios, estoy bastante cabreada, y necesito saber si mi impresión es parecida a la vuestra. Gracias.

miércoles, 28 de septiembre de 2011

¿Nadie al volante?

Haber transitado algún delirio, máximo en el caso de la psicosis, nos acostumbra a pensar en cómo pensamos, en cómo nuestra cabeza es capaz de tales viajes, capaz de atravesar la realidad de esquina a esquina, para luego pasar de lado, o quizá, volver a ella haciendo círculos.

Quienes además hemos sufrido alguna contención desproporcionada, más incomprensible cuanto que no reconocemos delito alguno para ser tratados de esa forma, ni reconocíamos en la bata blanca hostilidad, así de principio, provoca que si hablamos precisamente de principios, los de siempre se vean seriamente en bancarrota, por no hablar de la dificultad de gestionarlos abducidos por extraños estados de conciencia que todavía no hemos aprendido ni a reconocer como nuestros, ni a saber qué hacer con ellos.

Todavía espero, de boca de bata blanca, alguna explicación mejor que las que fui encontrando por el camino, no siempre fácil ni siempre en absoluto aterrador, tampoco exento de originales alegrías, como la de disfrutar otras realidades por el mero hecho de ser otras, muchas veces así, sin mayor leña que la que arde en los corazones inquietos que bombean tantas veces a destiempo, otras incluso extrañamente acompasados a las exigencias de lo contemporáneo en fugacidades comunicativas que no tienen desperdicio, sin hacerles mucho caso, pues se sabe que de la ilusión a la pérdida el camino es corto en más ocasiones de las que nos gustaría.

Aplicando aún de este lado el principio médico de evitación de daño, que me receté a mí misma después del susto de que me vieran en órbita, no se deberían desdeñar del todo las posibilidades de una mente que funciona diversa, obviando por petardas las incapacitaciones que nos caen desde el otro lado del espejo, devolviendo sorpresa a donde sólo había espacio para mitos obsoletos. Y que esa mente autoposibilitada para intentar lo de siempre, pasar por la vida con algo de alegría que no se vuelva amarga demasiado pronto, pues que se mire y se diga ¿conduces tú?

Esquizochiste

- Mamá, mamá! ¡Tengo esquizofrenia!
- Me alegro, hijo, anda, ponla en el cajón de los juguetes, lávate las manos y ven a comer, que es tarde.

lunes, 26 de septiembre de 2011

Caminitos para transitar

Casi todo por hacer:

http://www.scielo.org.ar/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1851-82652006000100002&lng=es&nrm=iso&tlng=es


¡¡Ánimo!!

domingo, 25 de septiembre de 2011

Pregunta

¿Se pueden tener delirios y psicosis, a lo largo de los años, sin que impliquen manifestar ninguna conducta "antisocial"?

(Posible respuesta: vaya usté a saber lo que es antisocial. Sobre lo que se vienen llamando delirios y psicosis podéis consultar el presente blog en alguna de sus más de doscientas entradas)

lunes, 19 de septiembre de 2011

¿Esquizofrenia = enfermedad cerebral?

Cómo crear la ilusión de que la esquizofrenia es una enfermedad cerebral:


http:/www.inteco.cl/articulos/020/esquizofrenia.pdf/


Evidentemente, no soy científica, pero me fijo.

jueves, 8 de septiembre de 2011

Novedosa terapia

Desde el prestigioso Instituto de Investigación CCNS (Como en Casa en Ningún Sitio), nos llega el último descubrimiento en terapias de vanguardia, aplicable a todo tipo de males malosos. La actividad no es nueva, tiene más de 200 años(*), pero sus aplicaciones terapéuticas no dejan de sorprendernos:

¡ANDAR EN BICICLETA!

Además de sus conocidos efectos beneficiosos en el campo de la salud física:

- Mejora del sistema cardivascular y respiratorio
- Aumento del tono muscular, especialmente en las extremidades inferiores


El Instituto constata otros efectos de tipo psicoterapéutico:

- Mejora del equilibrio cuerpo-mente
- Aumento de la coloracón facial, provocando un saludable aspecto modelo Heidi
- Secreción de endorfinas, cuyos efectos son: alegría infantil, risa sana, (favorecen también la visualización positiva de retos futuros)
- Refuerzo de las relaciones sociales (quedar para andar en bici ayuda a compartir todas sus ventajas)

Por último, se deben constatar los efectos secundarios negativos:

- El primer día de terapia, si no hay práctica previa, la secreción de endorfinas puede provocar insomnio ocasional. A partir del segundo día, el insomnio se verá sustituido por un sueño de calidad profunda y reparadora.



Frecuencia mínima recomendada:

- Dos días pòr semana, en sesiones de dos horas aproximadamente, con paradas a discreción.

Frecuencia máxima recomendada:

- Consultar entrenador deportivo profesional.




(*) El primer prototipo de lo que siglos después sería la bicicleta, lo diseñó Leonardo Da Vinci, visionario, artista y humanista del Renacimiento Europeo.

lunes, 5 de septiembre de 2011

Documento ONU sobre Salud Mental en Europa

Comunicado Menthal Health Europe:

- http://www.aen.es/index.php?option=com_content&view=article&id=458:comunicado-mental-health-europe-las-naciones-unidas-arrojan-luz-sobre-los-europeos-olvidados&catid=366:noticias-breves&Itemid=138

Este enlace remite al anuncio de un informe de la ONU sobre la situación de los diagnosticados en Europa, que saldrá a principios del próximo año, y que se presenta como una importante herramienta para grupos de presión en el terreno de los derechos humanos en salud mental. Da cuenta de la situación actual de los diagnosticados europeos, denuncia situaciones de discriminación, tanto jurídicas como de trato en las instituciones, y aboga firmemente por una mayor desinstitucionalización en favor de tratamientos más comunitarios. Habrá que estar atentos.



lunes, 29 de agosto de 2011

CHIN CHIN

Como acto simbólico, hoy voy a chuzarme de lo lindo, con texto oficial y todo, aquí va:

"Brindo por todos los manipuladores (a partir de ahora sobreentiéndase también femenino, si lo hubiera o la hubiese), trepas, acomplejados, celosos, desagradecidos, guardianes irredentos de reputaciones intachables que esconden la mierda debajo de la alfombra, ladrones de calmas ajenas, de textos, de sueños.

Brindo también por novios, amigos, familiares, colegas y vecinos que los aguantan, que los disculpan, que los comprenden, que dan la cara por ellos, que saben transformar una palabra suya en melodrama para todos los públicos.

Donde siempre a las nueve

domingo, 21 de agosto de 2011

La duda más grande

Hay una idea que me ronda la cabeza desde que empecé este blog, desde que fue leído y comentado por personas que valoraban mi discurso en la medida en que aportaba algo o, simplemente, ponía palabras a experiencias de tipo psicótico y/o delirante de una forma que no terminaba de aparecer en los manuales de psiquiatría y psicología, o que si lo hacían, era de forma muy minoritaria y marginal. Supongo que si algo tiene de novedoso es su subjetividad, o mejor dicho, su intersubjetividad, entre la mía y la vuestra, entre una y otra de las mías.

Nada de esto resuelve mis dudas. O quizá, escribiendo ahora, al contaros cuáles son, empezará un camino para resolverlas, quizá vosotros, quizá yo misma, probablemente lo haremos entre todos, y no precisamente ahora.

Mi gran problema es cómo ayudar a una persona a reconocer su primera experiencia psicótica, su primer viaje a sus infiernos y a los infiernos de los otros. A identificarlo como viaje y no como residencia permanente. A reconocerlo como ficción que se entremezcla con la realidad, que se cuela como un mal aire e impregna toda la casa, contaminando a propios y ajenos. Son ellos, los cercanos, los otros, nuestros referentes afectivos más queridos y necesarios, los que empiezan a ver sin estar seguros de lo que pasa. Ven otra mirada, otras reacciones, otras ideas extrañas e insistentes , y se ven a sí mismos como observadores incómodos y desconcertados, como una especie de espías, sin sueldo, sin vocación, sólo preocupación. En este espionaje forzoso y forzado por las circunstancias se produce la gran paradoja psicótica: el "espionaje terapéutico" se asimila en el discurso psicótico, por obra y gracia de la autorreferencialidad (integración de TODA la realidad en el argumento psicótico) como "espionaje real", que confirma "la paranoia".

Pienso insistentemenete en cómo conseguí reconocerlo yo, cómo conseguí ponerme en situación de volar y seguir en contacto con la tierra. Supongo que fue una mezcla de voluntad y necesidad, voluntad de vivir con eso si se repetía, necesidad de conocerme muchísimo para salir sin ayuda profesional, viendo que ésta sólo consistía en medicación cuyos efectos secundarios no me dejaban reconocerme.

Además de la necesidad y la voluntad, me resultó imprescindible la confianza, cultivarla como una planta rara y delicada que exige continuamente cuidados especiales. Se trataba de tener algo muy claro:

- Ni mi familia, ni mi novio, ni mis amigos son espías ni enemigos. Toda conducta sospechosa por su parte en esa dirección se debe a que mi estado les obliga, de alguna forma, a ejercer una observación más intensa, a intentar razonar conmigo, a ayudar a desactivarme ideas que suenan a psicóticas. (porque las personas NO SOMOS psicóticas, tenemos ideas de ese tipo de forma puntual o por temporadas, y la diferencia es que, teniéndolas todo el mundo en algún momento de su vida, en sueño o vigilia, a algunos nos arrastran durante más tiempo y con más intensidad)

- De la misma forma en que confío en mi entorno, ellos confían en mí, saben que no voy a agredirme (ni a mí, ni a ellos, ni a nadie), que no voy a ponerme en peligro, que no voy a escaparme (aunque durante días he salido de casa con una pequeña mochila de fin de semana, en realidad era una forma de decirles "llevar esta mochila es un símbolo del viaje físico que NO voy a hacer", llevar esta mochila es mi forma de deciros que lo llevo en la cabeza)

- Mis viajes tienen un protocolo, que se puede observar (ahora, con todo lo que sabemos): ideas intensas y recurrentes, pre-psicóticas, acompañadas de irregularidades en el sueño, hiperactividad intelectual, hiperactividad social o lo contrario, puede darse de ambas formas. Y duración estable, alrededor de seis semanas, lo que tardo en subir, explotar arriba, ser consciente y tomar medidas para que baje. Y una vez que baja, baja. Remisión total.

Cuento esto una y otra vez, de muchas formas, desde diferentes puntos de vista, y aún así sigo con mis dudas: ¿cómo podría ayudar a que otra persona lo reconociese?
Supongo que tendría que tener tiempo y ganas de leer ciertos textos de este blog, lo cual sería extraño en medio de un viaje psicótico. Nunca se sabe. Probemos de otra forma, para ganar tiempo:

¿CÓMO SON LAS IDEAS PSICÓTICAS?

- Como un fogonazo, vienen con intensidad, se parecen a un "darse cuenta de repente" de que me persiguen, de que estos no son mis amigos, de que mis días están contados, de que mi jefe me odia... El efecto fogonazo puede confundirse con un destello intuitivo, por eso la intensidad con que se vive hace que se confunda con una especie de "verdad revelada", de naturaleza extraña pero indiscutible. La prueba de que no conviene dejarse llevar por ellas es que, al terminar el viaje, lo que se revela es lo contrario, y tus amigos, esos de los que desconfiabas, en realidad te quieren tanto que estuvieron cagados de miedo por si no volvías, y tú estás tan contenta de volver que hasta se lo cuentas (porque es buenísimo contarlo) con un cierto corte, un tanto avergonzada de haberles tomado por los malos de la peli.

- Como una parálisis, otra modalidad del fogonazo, más introvertida, más angustiosa. Te quedas muerto de miedo, abres muchísimo los ojos y no eres capaz de reaccionar, de contestar a lo que te preguntan, no te atreves a hablar con nadie de nada, puesto que "todos están en el ajo", y temes la peor de las reacciones digas lo que digas. En estos casos se producen la mayoría de los ingresos, puesto que la gente se acojona muchísimo cuando ven que no puedes articular palabra, y al no saber qué te pasa, la reacción natural es llamar a urgencias, sobre todo si, como vengo insistiendo desde el principio, es la primera vez.

- Con comunicación, quizás a medias, quizá con aires de misterio, pero comunicación al fin y al cabo. Eres capaz de contar lo que te pasa por la cabeza, y tu gente flipa, claro, porque lo que les cuentas le parecen marcianadas, sobre todo si, insisto mucho, es LA PRIMERA VEZ. En esta modalidad se pueden producir discusiones dignas del teatro del absurdo, y hay que tranquilizar las vehemencias, puesto que cada parte está defendiendo su forma de ver el mundo. La diferencia básica, la que da la clave de una posible psicosis, no es tanto la diferencia entre quien está con la idea psicótica y los demás, sino entre la persona cuando tiene la idea psicótica y esa misma persona cuando no la tiene. Al fin y al cabo la psicosis es un novedad con respecto a uno mismo, con respecto a su LECTURA E INTERPRETACIÓN DEL MUNDO ya que las novedades del mundo se producen para todos los días.

A los que funcionais con la modalidad comunicativa, os recomiendo leer este texto, a los demás también, y a vuestros amigos, familiares... No creo que pueda hacer, con este blog, mucho más que campañas de reconocimiento y concienciación, aportar alguna herramienta de andar por casa, y sobre todo, lo más importante:

LA PSICOSIS ES UN ESTADO MOLESTO PERO TRANSITORIO. REQUIERE CIERTO TIEMPO Y VOLUNTAD ORGANIZAR UNA RED CERCANA DE APOYO BASADO EN EL CONOCIMIENTO. LAS PERSONAS MÁS DOTADAS PARA AYUDAR A FORMAR ESA RED SON AQUELLAS QUE HAN PASADO POR EXPERIENCIAS SIMILARES Y TAMBIÉN PROFESIONALES DE LA TERAPIA, POR SUPUESTO.

(Durante muchos años se creyó lo contrario, que era conveniente alejar a una persona con ideas psicóticas de otra que también las tenía, por miedo a un efecto multiplicación. Durante muchos años también se creyó que a las personas con ideas psicóticas había que deshauciarlas y excluirlas de la sociedad. Durante muchos años se creyeron y se fomentaron muchas gilipolleces. A veces, el mundo hay que reinventarlo, aunque seamos pocos, aunque sea en un sitio pequeño, aunque estemos llenos de dudas)

jueves, 18 de agosto de 2011

El Abecedario de Gilles Deleuze. D de Deseo 1/3

Ya está bien de hablar de Deleuze, vamos a escuchar al propio Deleuze, en la medida en que la tecnología nos lo permite. Las entrevistas a los filósofos tienen la ventaja de ser menos áridas que la lectura de sus libros, y pueden incluso dar ganas de leer sus libros.
Este vídeo es sólo uno de los muchísimos que hay sobre estas conversaciones llamadas Abecedarios, si os apetece más, ya sabéis dónde encontrarlas.

Un abrazo


lunes, 15 de agosto de 2011

Agitation Free "First Communication" (Live)

Dedicada a toda Radio Nikosia, especialmente a Almu, Raúl y Joan. Porque me gusta la canción, el nombre del grupo, el título de la canción, y porque todo esto me hizo pensar en vosotros cuando la escuché. Un abrazo grande.





sábado, 6 de agosto de 2011

Puesta al día para amigos

Es verano, aunque en Galicia no se nota porque llueve casi siempre, incluso ahora. No pasa nada, una se acostumbra también a veranos brumosos y no excesivamente cálidos. Lo importante es que, a pesar de todo, es verano y suceden cosas propias de esta época: festivales de música folk, llenos de puestos de comida, bebida y artesanía, llenos de gente con ganas de pasárselo bien sin demasiada parafernalia, sin necesidad de ser super-fashion ni super tecnológicos, aquí seguimos con gaitas, tambores perrofláuticos y espontáneos vendedores de pizzas, arepas, arroces veganos, rosquillas caseras y galletas psicotrópicas. A pesar de la lluvia, o gracias a ella, lo que importa es la fiesta, los encuentros, campear el temporal a base de humores varios, a veces ácidos, a veces ingenuos, pero siempre terapéuticos. Un woodstock de andar por casa, sin grandes estrellas internacionales, pero con calidad local, y humana. Amigos que llaman de repente "vamos para allá", ¿qué comemos? da igual, hay de todo, vamos mirando. Aquí un chupito, ahora un falafel, ¿y esa empanada? la probamos, invito yo. ¿Mal de amores? ven pa quí que nos echamos unas risas, baila mujer, que con el cuerpo se mueve el alma, y mañana ya veremos.
Mañana más.
Buenas noches, felices sueños.

lunes, 1 de agosto de 2011

El estigma de los cojones

Estoy empezando a preguntarme para qué sirven las campañas contra el estigma, si no es para ponerlo de relieve, para incidir una y otra vez en la relación problemática y problematizada de la persona hecha producto (enfermo mental)con el resto de congéneres (sí, con gen eres, todos y cada uno´, compartimos mogollón, y la mayoría con moscas y ratas).

Las campañas antiestigma se llevan a cabo porque hay mala conciencia. Primero se hacen manuales de psiquiatría con descripciones y predicciones para no dormir, para que no duerma ni el diagnosticado, ni la familia, ni los vecinos. Una vez el vecindario entero tiene los pelos como escarpias por esa "bomba de relojería" que parece ser el niño calladito del tercero, de mirada algo perdida y cierto sobrepeso, ven un día por la tele que ese niño no es peligroso si se toma la medicación.

(Uff, menos mal, ahora sólo se trata de hacer turnos para vigilar que la madre vaya con regularidad al ambulatorio y a la farmacia, no sea que nos vaya a dar un disgusto.)


Hasta aquí el humor, bastante agrio.


Ahora toca imaginar...algún colectivo con algún estigma. Por ejemplo, las personas de Colombia y el negocio del narcotráfico. Veamos, se me ocurre una campaña contra el estigma. Una chica colombiana, vestida de ejecutiva y con gafas de intelectual, afirmando sonriente ante la cámara:
- Hola, me llamo Rosa, soy colombiana pero no soy narcotraficante.

¿Ridículo? ¿Ofensivo? ¿Está llamando el embajador de Colombia para pedir explicaciones por la campaña? Esto me hace pensar que los diagnosticados no tenemos embajada, cachis, habrá que hacerse con una. Por lo demás, a mi también me resultan bastante molestas las campañas antiestigma, después de analizar unas cuantas que pululan por ahí. Otra cosa son los documentales que dan voz en serio a las personas afectadas por el diagnóstico (algunas incluso por alguno de sus síntomas), ya ellas comentan, si les apetece, lo que le fastidia de la imagen que se tiene de ellas. Pero que esas campañas las hagan las mismas instituciones que favorecen discriminaciones y sobremedicaciones me parece una falta de respeto a la inteligencia de diagnosticados, familias y sociedad en general, un lavado de cara de esos que nos hacen pensar (a los diagnosticados), "cómo se os ve el plumero".

Prometo pensar, para que no sea todo crítica, en qué consistiría para mí luchar contra el estigma, y si eso ya os lo cuento otro día.

sábado, 30 de julio de 2011

Postporno

Hoy voy a ponerme cachonda, despúes de que unas buenas compañeras se hayan trabajado unas jornadas estupendas sobre cuerpos y lengua-sex, sobre postporno o, dicho de otra forma, sobre porno-queer. De la teoría (y de la práctica) queer, como creo que mencioné alguna vez, me encantan un par de cosas:

- El esfuerzo intelectual y conceptual por denunciar una cosmovisión estructuralista, que pretende dividir el mundo, y, lo que es peor, a las personas y sus múltiples identidades, en binomios férreos y cerrados de parejas de opuestos, de forma que todos nos veamos sociológicamente catalogados en hombre/mujer, heterosexual/homosexual, sano/enfermo, productivo/improductivo, dominante/dominado...bla bla bla.

- El activismo de la apropiación, que como un boomerang, o como un maestro de aikido, recibe el ataque, lo sujeta, se lo apropia, y lo devuelve como reivindicación. En nuestro terreno, el que por aquí abunda, viene a ser como... sí, estoy diagnosticada ¿y qué? Desde aquí veo el mundo con más lucidez, conozco tu mundo y el mío, habito los dos sin dejar de ser lo que soy, lo que quiera que eso sea. No me vengas con rollos ontológicos,de la relatividad de la ontología aprendí a base de práctica y cuestionamiento. Cuestiono tus teorías sobre mis circunstancias, es cierto, tus teorías sobre los vericuetos de mi mente inquieta, pero más me cuestiono a mí misma a causa de ellas, a mi pesar, y es eso lo que me da cierta ventaja, combates de entrenamiento. Tú tienes poder prestado. Quizá lo más interesante es que me gusta no ser tú. Me gusta jugar a las adivinanzas, me gusta reinventarme, me gusta despistarte y escandalizarte, hacerte dudar, jugar contigo como conmigo, sin más violencia que tus prejuicios. Me pone cachonda ¿y qué?


Diana y Lucía, gracias por venir, gracias por ayudar a que esto siga erecto. (Definitivamente, no es un guiño al psicoanálisis)

miércoles, 27 de julio de 2011

Violencia vs Locura

Comprobamos una vez más, a raíz de los macabros asesinatos de Noruega, que se repite hasta la saciedad el reflejo sociológico de unir, automáticamente, la palabra violencia a la palabra locura. Esta estrambótica y bienpensante asociación se da de forma particular cuando nadie quiere asumir las raíces sociales y educacionales que pudieran llevar a tales grados de violencia. Sí, la violencia, esta violencia en concreto, es muy alarmante, muy vergonzosa, muy rechazable y execrable, pero hay que admitir que no hace falta, ninguna falta, estar loco para ejercerla. Sólo hace falta tener bien instalada en la cabeza una ideología, muy de moda entre un número no pequeño de europeos últimamente, basada en el odio cosificante del considerado "enemigo". Si a eso le añadimos los medios materiales (compra de armas, elección del momento y lugar), nula empatía hacia las víctimas unida a la promesa de simpatía que despertará entre sus "iguales" como héroe... pues tenemos un genocida auténtico, casi como los de antes, un "delito de odio" (término de nuevo cuño para las agresiones y asesinatos sociológicos) con todos sus ingredientes.

Y luego, además, como a mayores, es posible que también esté loco, (cómo no, en el DSM cabemos todos), pero si seguimos considerando locos a los violentos sólo porque no queremos aceptar la violencia como conducta fría y premeditada, como conducta voluntariamente ejercida, entonces sería bueno sustituir las bases militares por consultas psiquiátricas, porque eso de manejar armas no parece muy sano para la cabeza.

Pero las prioridades son las prioridades, los hechos jurídicos van por un lado, y los sufrimientos mentales por otro: este individuo se ha delatado como asesino de odio por sus actos, por sus motivaciones, por sus textos. Luego, si se quiere hacer mirar todo lo demás, que lo haga, si se quiere medicar para olvidarse de si mismo, que lo haga, seguro que el garantista estado noruego le ofrecerá eso y más, si bien ese mismo estado está considerando que su máximo de 21 años de prisión se queda un poco corto para las espeluznantes acciones de este individuo, y que la acusación de crímenes contra la humanidad se ajusta mejor a su premeditada masacre.

El que lo quiere hacer pasar por loco es el abogado, claro. Ahora estará en trámites con los psiquiatras, que tienen que arrimar el hombro al debate, y dejar de lado idelologías y cosas de esas para mirar en la bola de cristal de la ciencia. ¿Ciencia? ¿Debate? perdonad, estoy muy confusa, la cosa no es para menos.

domingo, 24 de julio de 2011

Sueño de la razón: Retorno.

Decía Enstein que el método científico es sólo una herramienta, y que los grandes descubrimientos nunca surgen de usarlo, sino de apartarse de él para soñar de otra forma. Luego coges de nuevo la herramienta para darle forma al sueño, o entonces el propio sueño se convierte en herramienta.

La herramienta de un experto en problemas de la mente ¿cómo será?

lunes, 18 de julio de 2011

Autogestión de la psicosis sin fármacos

Condiciones necesarias para no morir en el intento:(también se llaman consejos, me haces caso sólo si te da la gana)

- Reconocer las ideas psicóticas

- No enfrentarlas con angustia, sino con mala hostia ("a mi tú no me chuleas", a la idea)

- Hacer lo que te pida el cuerpo, con límites previos (los míos son: nada de autolesiones, ni gritos, ni borderías, nada de provocaciones a la autoridad sanitaria, no sea que quieran ayudarnos, tal y como están de recortes)

- Reconocidos los límites, se admite llorar, estar en silencio, reirse estrepitosamente, correr, pasarse horas ante la tele, dormir, decir en alto que tengo paranoias, o ansiedad, o fobia social, o lo que sea (según la sensibilidad del espectador y la información que le queramos dar).

- Durante los días que dure el asedio, ejercitar prácticas de resistencia, como por ejemplo pensar en lo muy fortalecidos que saldremos del mismo, en lo especiales que somos por sentir tantas cosas raras (no se consuela quien no quiere), en la cantidad de aventuras que contaremos después (anda que no me río yo ahora, y hago reír, con las ideas autorreferenciales y su desarrollo en clave cómica)

- Intentar evitar, esos días, a las personas más impresionables, aquellas más inclinadas a usar los teléfonos de urgencias. (Es de buena gente cuidar a los demás y evitarles sustos. Sentirse cuidadora en esos momentos raros provoca un balsámico efecto terapéutico)

- En los peores días, dividir a la concurrencia en poli bueno y poli malo, siempre hay poli bueno. De cada interacción siempre hay un referente que da confianza, eso contribuye a la supervivencia de la parte estable de la psique. Normalmente es el subconsciente quien enciende este piloto automático, su memoria apuntala las posibilidades de recuperación, permite que la parte estable se mantenga estable.

- Evitar, en esos días, lecturas sobre el estado de la realidad (habitualmente supera a la ficción y multiplica el estrés) Es un consejo que yo no sigo, lo reconozco. Tendré que mejorar ese aspecto.

- Arrimarse en lo posible a la comedia en todas sus variantes: personales,cinematográficas, musicales...cuidado con el humor ácido, puede ser contraproducente por el riesgo de la literalidad.

- Quererse mucho, especialmente cuando se tiene la conciencia de que esto que nos pasa no gusta a mucha gente. Precisamente por eso hay que poner un plus de autorrespeto y autoafirmación, buena falta nos hace para convivir con algunos cuerdos de ahí afuera.

- Pensar que cada vuelta de tuerca (perdón, de tornillo) nos hace más fuertes, nos ayuda a conocernos mejor, nos recoloca (no entender en sentido literal, o sí, en caso de biologicismo patológico).

- Pensar que determinadas conductas consideradas normales nos ponen los pelos de punta o nos dan vergüenza ajena ayuda a ser justos con nosotros mismos, aunque sea recurriendo in extremis al agravio comparativo (del tipo, "pues si esto es ser normal, que me dejen como estoy" Insisto que es una medida in extremis, lo ideal es comprender las corduras ajenas con el mismo cariño, tolerancia y condescendencia que deseamos para nosotros. Jijiji)

- Asumir como riqueza la "personalidad fronteriza" que nos aportan estas experiencias.

- Pensamiento talismán: Sí, tengo paranoias, lo raro es que tú no las tengas, habitando el mismo mundo.




Queervisión: ¿de verdad te piensas que mi persona se reduce a lo que escribo en este blog temático?

miércoles, 13 de julio de 2011

Fin de la huelga de hambre

( Más información en rumboagaza.org )


Qué rica estará la comida de hoy al saber que mis amigos también comerán.
Nunca dudéis de la capacidad de unas pocas personas para cambiar cosas, esa es la verdadera fe que mueve montañas.
Buen provecho.

sábado, 9 de julio de 2011

Huelga de hambre

Dentro de pocas horas, en la embajada española de Grecia, una persona a la que aprecio mucho empezará una huelga de hambre para protestar por el silencio del Ministerio de Asuntos Exteriores del Gobierno de España ante la negativa de las autoridades portuarias griegas a que el barco español Guernika, miembro de la II Flotilla Rumbo a Gaza, pueda efectuar ese viaje, teniendo en su haber todos los permisos internacionales para navegar. O dicho de otro modo, todos los papeles en regla.

Si seguís las noticias (la mejor fuente es la propia página: rumboagaza.org), recordad que parte de la salud mental de un grupo de amigos de por aquí estará pendiente de lo que ocurra por allí, cosas de este mundo, siempre más pequeño y conectado de lo que parece.

Desde aquí muchos abrazos, mucha fuerza y mucho apoyo. Y muchas gracias. (Porque los problemas de allí, el día menos pensado son también los de aquí. Todos somos población civil hasta que se demuestre lo contrario)

viernes, 8 de julio de 2011

Trabajar es lo que tiene

Que aporta dinero (aunque no mucho), autonomía, posibilidad de relacionarse socialmente, de autodeterminarse en un mundo en el que carecer de todo esto es fuente continua de desasosiego, por decirlo suave. Estoy a menos distancia de devolver los microcréditos llovidos del cielo de personas estupendas que hacen la labor de bancos de los pobres, esos que tan buenos resultados han dado en países como India, o muchos otros del continente africano. Por aquí se estilan poco, los bancos andan envueltos en tribulaciones mucho menos románticas, por decirlo suave. A pesar del empobrecimiento masivo de la población, que avanza vertiginosamente, la mentalidad imperante es que seguimos siendo occidente, a pesar de todo. Y una mierda, digo yo, o poco le queda si algo hay de cierto. No sé qué más pruebas hacen falta, cuando ser mileurista es más que un privilegio, y roza la categoría de milagro. Quienes vivan instalados en el milagro, pueden empezar a mirar alrededor, seguro que algún amigo solicita microcrédito, y concedérselo puede ser más que un gesto de amistad, puede ser la diferencia entre el pavor a la exclusión y la dignidad.

Siempre hay quien lo pase peor, es cierto, y aprovecho para recordar la triste noticia de que en Somalia se avecina una hambruna descomunal, debido a la sequía. Si tuviese mucho dinero, dudaría en dónde invertirlo para paliar ese desastre. ¿En acciones políticas, que ataquen lo estructural? ¿en ONGs, que ponen "tiritas", por más bienintencionadas que estén? ¿En Amnistía Internacional, si recuperan la necesaria campaña global de reivindicar derechos económicos, sociales y culturales? ¿En el ACNUR de la ONU, asistencialista y desbordado por la creciente cantidad de refugiados de toda índole, bélicos, políticos, climáticos? Ayudadme a pensar, por favor, pero en cualquier caso, no os quedéis parados. Que el mundo es una mierda ya lo sé, que todo esfuerzo parece inútil también lo he oído, que uno sólo es rico o pobre según con quién se le compare sólo sirve para perpetuar la parálisis, pero que otro mundo es necesario, y que no se hace sólo, podría ser un buen principio de conciencia planetaria, porque al otro lado del capitalismo salvaje del sálvese quien pueda estamos casi todos, aturdidos y shockados, como bien explicó Naomi Klein no hace tanto tiempo (La doctrina del shock). Ya que hablamos tanto de mentes y psiquiatras, de biologicismos y socialismos, de causas estructurales y beneficios de las farmacéuticas, podíamos pararnos a pensar en que, a veces, ser o estar enfermo mental no es más que un lujo de quien tiene tiempo para reconocer(se) tales categorías, tiempo y formación para voltear análisis y diagnósticos, teorías y prácticas oficiales y alternativas.

Hace poco, recibiendo dosis de crisis en el resultado de mi trabajo, reducidos los ingresos a la mitad de lo previsto por época y esfuerzo realizado, pensé para no agobiarme: ¿y yo de qué me quejo? Peor están en Palestina, en Somalia, en Bolivia. No es más que un consuelo egoísta o solidario. Egoísta porque, si todos pensasen como yo en ese momento, nadie reivindicaría nada, y todos aceptarían la reducción de su calidad de vida por el relativismo aplicado de compararse con quién está peor. Solidario porque me libra, en cierto modo, de poner mis aspiraciones materiales en el canon de mi civilización, la del ilusorio y no del todo limpio bienestar a costa del colonialismo salvaje, de la opresión de otros pueblos privados de derechos que aquí creemos, creíamos, inalienables(ja). Así que, dejando de lado estas consideraciones, o encarándolas aún sin fuerzas para tal descomunal cuestión, sólo queda reivindicar, aún a riesgo de parecer un chiste amargo en los tiempos que corren (mientras se ríen en nuestras narices), TODOS LOS DERECHOS PARA TODOS. O eso, o entonces qué.

(Mentalmente estoy algo mejor, es algo ahí fuera lo que no acaba de estar bien. Si os sobra el dinero, podéis repartir un poco. Por si os sirve de aliciente, el dinero que los inmigantes envían a sus países de origen en forma de remesas-arañadas al sueldo de mierda producto de la explotación laboral de la que son víctimas a diario- supera, por triplicado, al montante que los países ricos destinan a ayuda al desarrollo. Otro ejemplo que debería ponernos las pilas es lo que nos superan en solidaridad con los refugiados los países en vías de desarrollo, con muchas menos trabas burocráticas, económicas y personales al hecho de acoger a los refugiados de conflictos de toda clase, en cantidades que pondrían los pelos de punta a la racista y prejuiciosa europa actual, que ya no sabe si colocar a la policía antiinmigración en la cocina o en el baño de cada uno de nuestros bienpensantes y pulcros hogares. Ya que nos mola tanto la competitividad, que parece ser parte esencial de las civilizaciones "fuertes" y "exitosas", estaría bien aplicarla a la solidaridad, competir en ese juego, ser los mejores, los más dotados, los namberguan. Mola ¿no?)